Hace muy poco, una amiga de toda la vida tuvo su primer bebé: una niña hermosa que se llama Martina, tocaya de mi Martín. Mil recuerdos vinieron a mi mente el día que fuimos a conocerla. Y desde entonces no he podido evitar pensar en aquellos primeros momentos y días después de que nació mi hijo. A la distancia, parece que fue hace mil años, ¡pero no! Hace apenas poco más de 13 meses que yo misma estaba como mi amiga, conociendo a mi hijo e iniciándome en la maternidad.
Lo que quiero decir a las mamás primerizas es que el tiempo se pasa volando, mucho más de lo que uno quiere creer. Todas esas “primeras veces” se vuelven menos y más lejanas. Ahora mismo no recuerdo bien si empezó a bailar a los 7 meses, ¿o más bien a los 9? Y esto es válido tanto para las cosas más hermosas, como para esos momentos “imposibles” en los que parece que no encontramos la salida a alguna situación, o dudamos de nuestra propia fortaleza e instinto materno.
El tiempo se pasa volando, mucho más de lo que uno quiere creer.
Visita nuestro artículo: El libro de los recuerdos.
Me parece importante pensar que, sin lugar a dudas, cada una de nosotras somos la mejor mamá para nuestros hijos: con aciertos, dudas, errores y frustraciones. Sobre todo, creo que esos sentimientos de “¿cómo le voy a hacer con esto o aquello?” son tan pasajeros que cuando te detengas y voltees a ver, tu hijo (como el mío), ya tendrá un añito o más y habrá dejado de ser ese bebé (“que no duerme”, “no hace caso” o que “vomita mucho, ¿tendrá reflujo?”) para comenzar a ser una personita mucho más independiente.
Ahora que mi bebé está dejando de serlo a pasos agigantados, comienza la nostalgia de cuando me cabía acostado en el pecho, o de cuando apenas empezó a sonreír a voluntad, de las veces que me preocupaba porque tenía cólicos, o de sus primeros baños en que me daba terror que se le cayera el ombliguito. Todo eso quedó en el recuerdo.
Así que el consejo que les puedo dar es:
No se desesperen si creen no poder resolver algo, lo van a lograr y en unos meses no se acordarán. La noticia es que sus bebés SÍ crecen y lo hacen MUY rápido. Todo es pasajero. ¡Disfrútenlo al máximo!