Otro estudio publicado por el European Journal of Pediatrics concluyó que aquellos niños que fueron amamantados por 6 meses o más tienen, en promedio, un coeficiente intelectual 3.8 puntos mayor a los bebés que únicamente recibieron leche de fórmula.

¿Cómo es que amamantar ayuda a desarrollar la inteligencia de tu bebé?

Los científicos atribuyen esta diferencia en inteligencia a la estimulación sensorial y emocional que recibe el bebé al ser amamantado. A su vez, la estimulación impacta positivamente su desarrollo cognitivo y neuronal (dicho de otro modo, su inteligencia).

Por último, cabe mencionar que si no puedes amamantar, existen otros ejercicios que puedes hacer para promover la estimulación sensorial, cognitiva y emocional de tu bebé. Puedes hacer esto desde antes de que nazca a través de la estimulación temprana prenatal. Otros ejemplos, ya que tu bebé nació, son pasar tiempos prolongados haciendo contacto piel a piel con tu bebé o haciéndole masaje a tu bebé. Sin embargo, si nada te lo impide, te sugerimos que lo amamantes para que aproveches todos los beneficios de la lactancia materna te pueden traer a ti y a tu bebé.

Ventajas de una cesárea:

• Se aplica una inyección epidural en la parte abdominal. Gracias a esta se pierde toda sensibilidad de la cintura a los pies. Esto quiere decir que el nacimiento de tu bebé será sin dolor.

• Puedes programar la fecha del nacimiento de tu bebé.

• La operación dura de 3 – 4 horas (incluyendo la preparación y la recuperación), comparado con el parto natural que puede durar hasta 20 horas.

Desventajas de una cesárea:

• Tienes que pasar por una cirugía con anestesia, y cualquier cirugía conlleva riesgos de infección y daño a otros órganos.

• Una cesárea no estimula los sentidos de tu bebé.

• Debido a que no se genera oxitocina, algunos estudios indican que se puede llegar a disminuir el  vínculo afectivo inicial entre tú y tu bebé. Sin embargo, este se puede recuperar con el tiempo y un apego seguro. Descubre los tipos de apego que existen, dando clic aquí.

• Ya que te tienen que llevar al cuarto de recuperación después de tu cirugía, por lo general, tu bebé no entra en contacto inmediato contigo.

• La recuperación puede tardar de cuatro a ocho semanas, un plazo de recuperación mucho más largo que el de un parto natural.

• Te costará trabajo caminar los primeros días.

• Puedes sentir náuseas en los primeros días, por el efecto de la anestesia.

• Amamantar te puede resultar más difícil por el dolor de la cirugía.

• En promedio, el útero de una mujer únicamente aguanta 3 partos por cesárea. Adicionalmente, los embarazos después de una cesárea son más riesgosos. Por lo que la cesárea no se recomienda para mamás que quieran tener múltiples hijos.

• La cesárea es más cara que el parto natural.

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¡Descubre a qué equivale!

1.- 24 444 Gansitos

Fuente: http://www.foiclecanda.mx/proyectos/gansito/

2.- 27 500 Tacos de pastor

Fuente: flickr.com / T.Tseng

3.- 1 año en el Tec de Monterrey

Fuente: http://www.archdaily.mx/mx

4.- 4 motocicletas Vespa

Fuente: http://www.vespa.com/en/the_choice

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5) 2.4 automóviles Matiz

Fuente: http://commons.wikimedia.org/

 6.- 22 computadoras Dell

http://www.electroshipping.com/

 7.- 20 iPhones

Fuente: http://www.hdwallpapersinn.com/

 8.- 16 923 litros de gasolina

Fuente: http://www.desdeelbalcon.com/

9.- 550 pares de zapatos

Fuente: Flickr.com / Phil Parker

 10.- 11 vuelos a París

Fuente: flickr.com / ERIC SALARD

 11.- 27 500 Latas de Coca-cola

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 12.- 32 000 Entradas al cine

Fuente: 123rf.com

 13.- 23 años de gimnasio

Fuente: flicrk.com / UNE Photos

 14.- 4 lingotes de oro de 100 gramos y 24 kilates

Fuente: http://www.badische-zeitung.de/

 15.- 316 000 tortillas

Fuente: flickr.com / David Boté Estrada

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• “Consejos para mamás: 10 cosas que no deben preocuparte en el embarazo”

Seguramente te preguntarás ¿cuándo se da la primera menstruación después del parto? La verdad es que no podemos darte una respuesta definitiva, ya que varía de mujer a mujer. Algunos de los factores que influyen en el adelanto o atraso de la menstruación son:

• Lactancia: En las mamás que no lactan, la regla puede aparecer después de expulsar los loquios del postparto, es decir el sangrado vaginal que representa la cicatrización del útero. Por lo general, el regreso de la regla en ellas ocurre entre el primer y el cuarto mes después del parto. En el caso de las mamás que amamantan, la primera menstruación se suele aplazar aún más ya que la lactancia materna puede inhibir la regla. Incluso en algunas ocasiones, esta aparece hasta dos años después del nacimiento del bebé.

• Número de hijos: Las mamás que han tenido varios hijos tienen una recuperación del útero más rápida que las mamás primerizas. Esta recuperación favorece el regreso del periodo menstrual.

• Pérdida de sangre posparto: Las mamás que perdieron mucha sangre durante el parto y el posparto pueden presentar una carencia de hierro. Para evitar una descompensación, el organismo atrasa la aparición de la regla.

¿Sabías que al sangrado después del parto se le conoce como “loquios”? Para conocer más del tema, da clic aquí.

Una vez que te regrese la regla, probablemente será diferente a como era antes del embarazo. Es normal que sea más abundante y dure más de lo usual. En caso de que tengas dudas sobre el regreso de la menstruación después del parto, te recomendamos acudir a tu médico para que solucione todas tus dudas.

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TE RECOMENDAMOS LEER: “¿Cómo dormir en el embarazo?”

De hecho, durante el embarazo tu bebé pasa la mayor parte del tiempo dormido, justo como lo hará de recién nacido. Se estima que en la semana 32, tu bebé duerme entre 90 y 95% del tiempo y mientras más se acerca la fecha en la que va a nacer duerme del 85 al 90% del tiempo.

 Cuando tu bebé duerme durante en el embarazo tiene otro tipo de sueños que le ayudan a organizar lo que ha ido aprendiendo durante su estancia en tu panza

A partir de la semana 32 tu bebé ya tiene la capacidad de entrar en el sueño MOR (también conocido como REM, por sus siglas en inglés) y dormir con mucha profundidad. Durante este tipo de sueño, sus ojos se mueven de un lado al otro, justo como lo hacen los nuestros cuando entramos en la etapa más profunda del sueño. Para conocer más acerca de tu bebé en el tercer trimestre de embarazo, da clic aquí,

Hay algunos científicos que afirman que los bebés sueñan mientras están en tu panza. Sin embargo, hay mucho debate respecto a la manera en la que tu bebé experimenta sus sueños, y el consenso es que no lo hacen como los niños o adultos, ya que esta capacidad será desarrollada hasta aproximadamente los 5 años de edad.

Los doctores, en su mayoría, están de acuerdo en que cuando tu bebé duerme durante en el embarazo tiene otro tipo de sueños que le ayudan a organizar lo que ha ido aprendiendo durante su estancia en tu panza. Esto le permite ir organizando su cerebro y prepararlo para cuando nazca.

¿Y tú qué sueñas en el embarazo?

Al mismo tiempo que tú estás sintiendo las contracciones de la labor de parto, tu bebé está pasando por un proceso muy intenso que lo llevará hasta tus brazos. Tal vez nunca lo has pensado de esta manera, pero tu bebé es quien pone el parto en marcha, ya que es él quien sabe de modo instintivo cuando debe nacer. Esto se debe a que es sensible a los cambios hormonales de tu cuerpo. Cuando en tu cuerpo hay una disminución en los niveles de estrógeno y de progesterona, y un aumento de prostaglandina y de oxitocina, tu bebé recibe la señal de que ha llegado el día de su nacimiento.

Una vez que tu bebé se ha dado cuenta que debe dejar el útero, se prepara para nacer y empieza a acumular mucha energía, absorbiendo una gran cantidad de nutrimentos a través de la placenta. De igual forma, tu bebé comenzará a producir una gran cantidad de endorfinas, las cuales disminuirán su dolor al momento de atravesar el canal uterino.

En un parto sin complicaciones, cuando tú empiezas con las primeras contracciones, tu bebé ya habrá adquirido la posición fetal para nacer. Es decir, estará con sus extremidades encogidas y su cabecita justo por encima del canal de parto. A diferencia de lo que tú puedes llegar a sentir, las contracciones no le provocan ningún dolor, ni malestar a tu bebé. Incluso se cree que el movimiento de las contracciones sobre la placenta llega a ser placentero para él.

Una vez que el cuello uterino se ha dilatado y que las contracciones se vuelven regulares, frecuentes y más dolorosas, tu bebé provocará el rompimiento del saco amniótico para anunciar que está listo para ser recibido. Como resultado de la fuerza de gravedad y de las contracciones de las paredes uterinas, tu bebé empezará a descender por el estrecho canal de parto.

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Cuando llega por fin al último tramo y es momento de salir al mundo, tu bebé sentirá los empujones de tus contracciones. Estas no le causarán dolor, pero sí lo guiarán a través de la pelvis para que encuentre la salida.

Tu bebé, después, atravesará los músculos del periné y sacará su cabecita al mundo. Tu médico o partera lo ayudarán a que su cuerpo salga más rápidamente. Su primer reflejo será respirar y llenar sus pulmones de aire, lo cual conseguirá en un segundo y lo demostrará con un potente llanto. Este por lo general es un síntoma de que está saludable. Para conocer más acerca del examen físico del recién nacido, da clic aquí.

Justo después de su nacimiento, tu bebé solo encontrará tranquilidad una vez que lo pongan sobre tu pecho. (Ver artículo Contacto piel a piel del recién nacido).

En sus primeros momentos de vida, solo tú representas la seguridad y el amor que necesita.

Lo más recomendable es que te esperes por lo menos 6 semanas para tener sexo después del parto.

¿Por qué debo esperar? Durante el parto, tu cuello uterino atravesó por un importante cambio: la dilatación. Debido a esta, las paredes internas de la vagina están susceptibles a contagiarse de infecciones. Además, el piso de tu pelvis se encuentra inflamado, volviéndote propensa a padecer dolores. Y por si no fuera poco, mientras tu útero va sanando, presentarás un sangrado vaginal llamado loquio, el cual simboliza la cicatrización interna. Este se presenta después de un parto natural o por cesárea.

Para conocer qué debes hacer para fortalecer el área pélvica después del parto, te recomendamos leer este artículo.

Debido a todos estos factores, normalmente se aconseja esperar seis semanas para volver a tener sexo después del parto. Por lo general, este es el tiempo que toma en cicatrizar el útero, lo cual se traduce en una reducción del sangrado y su cambio a un color oscuro. Es importante recordar que el tiempo recomendado varía en cada mujer, por lo que siempre es prudente visitar al médico para que te asegure que la cicatrización está completa y que es seguro regresar a la vida sexual.

Te sugerimos que cuando decidas reiniciar tu vida íntima tomes tus precauciones anticonceptivas, debido a que para el útero puede ser riesgoso pasar por otro embarazo tan pronto (Ver artículo ¿Cuánto tiempo debo esperar antes de volver a embarazarme?).  Acude a tu médico para que te recete un anticonceptivo que no esté contraindicado durante la lactancia.

No te sientas presionada a reanudar tu vida sexual a las seis semanas

Por último, te sugerimos que no te sientas presionada a reanudar tu vida sexual a las seis semanas. Durante las semanas y meses que vienen después de tu parto, es muy normal que no sientas ganas de tener sexo: el cansancio de tener a un nuevo hijo, los reajustes hormonales y la lactancia materna afectan tu libido. Así que sea cual sea la razón, es importante que no te sientas con prisas para tener sexo y que lo hables relajada y abiertamente con tu pareja. También es importante que si aún no quieres tener sexo, busquen otras actividades para mantener su intimidad, ya que su bienestar como pareja es igual de importante que el bienestar de su hijo.

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¡No te preocupes! Todas las mamás pasan por situaciones similares en las que sienten que el comportamiento de su bebé se les sale de las manos. Ya sea porque tiene demasiada energía y hace un desastre por donde pase, o porque aunque es demasiado tranquilo, le tiene un miedo terrible a los perros y hace berrinche cada vez que se encuentra uno en la calle.

 ¿Qué puedes hacer?

Cuando esto ocurra, en lugar de darle muchas vueltas a las preguntas “¿Por qué mi hijo hace esto?”, “¿Por qué no soy capaz de controlarlo?”, intenta enfocarte en todas las cosas que adoras de tu bebé. Después cuando ya estés tranquila analiza que tan grave es el asunto. Si crees que es una cosa temporal entonces solo evita las situaciones incomodas, como salir con tu bebé a donde sabes que tiene que guardar silencio, o a la casa de tu amiga que tiene un perro.

En caso de que el asunto no sea temporal y cada vez se vuelva un problema mayor, no intentes culparte a ti o a tu método de crianza, lo mejor será que busques ayuda con alguien cercano para que te aconseje, o también puedes acudir con algún especialista. Recuerda que tu bebé es un mundo nuevo, y te pondrá en situaciones con las que no estabas acostumbrada a lidiar, pero esto no significa que tengas que hacerlo sola, ni que debas que conocer la respuesta inmediata para todos los problemas.

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Piensa que apenas vas iniciando la aventura con tu bebé, y que a lo largo de tu vida te encontrarás en varias situaciones que te hagan sentir que no estás haciendo un buen trabajo. Sin embargo, no olvides que también habrá muchos momentos en los que te sentirás muy orgullosa de tu hijo, y tú serás muy feliz al saber que tu trabajo como mamá lo ayudo a alcanzar sus metas.

Te recomendamos que en ambos casos te concentres en el amor que se tienen. Y por último, piensa que no hay madre perfecta en el mundo, pero que tú estás haciendo el mayor esfuerzo para ser la mejor mamá que tu bebé puede tener.

Por último, te sugerimos entrar a este artículo, donde encontrarás consejos de respiración para manejar y relajarte en diferentes situaciones.

A continuación algunos tips para que puedas manejar el cansancio en el embarazo:

• Aliméntate adecuadamente: No significa comer de más, sino comer de manera saludable y balanceada. Consume alimentos con alto contenido calórico y carbohidratos, por ejemplo nuez, mantequilla de cacahuate y queso. Compleméntalos con verduras y frutas frescas. También intenta comer varias veces al día en porciones pequeñas.
• Duerme ocho horas por la noche: Aunque no tengas sueño, es importante que trates de dormir 8 horas seguidas por la noche. Tal vez sea imposible porque tienes que levantarte para ir al baño, pero haz el intento. Si puedes tomarte una siesta por la tarde mucho mejor. Dormir bien te ayudará a sentirte más descansada.
• Pide ayuda: No intentes ser la súper mujer en esta etapa de tu vida. Si no te sientes capaz de realizar todas las actividades que normalmente hacías, pide ayuda a tu pareja, familia y amigos. Ellos entenderán tu situación y estarán felices de ayudarte.
• Ejercítate: Puedes hacer ejercicios leves, los cuales te ayudarán a activarte y a descansar mejor por la noche. No intentes forzar a tu cuerpo porque eso solo agravará el cansancio. Te recomendamos practicar yoga o natación prenatal.
• Date un tiempo: Si estás cansada el mejor remedio será descansar y relajarte. Créate un espacio de relajación: puedes meditar, darte un baño caliente o pedirle a tu pareja que te de un masaje; también puedes sentarte a leer o a escuchar música. Lo importante es que te desconectes del mundo por unos minutos.
• Evita el estrés: Evita las situaciones estresantes o haz un plan para relajarte. El estrés aumenta el cansancio y además es perjudicial para tu bebé. Si tiendes a estresarte, las clases de yoga o meditación pueden ser una buena opción para relajarte.
• Mantente hidratada: Toma mucha agua a lo largo del día, además de que es vital que estés hidratada, te ayudará a manejar el cansancio en el embarazo. Evita las bebidas con cafeína y azucaradas.

En caso de que sientas que el cansancio te domina, aún después de seguir estos tips, te recomendamos acudir a tu médico para que descarte anemia o alguna otra enfermedad.

Recuerda que tu salud es la salud de tu bebé, ¡cuídate mucho!

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