Si calculaste tu Índice de Masa Corporal y te diste cuenta que tienes sobrepeso u obesidad, y aún no estás embarazada: es momento de tomar cartas en el asunto y comenzar a bajar de peso. Esto te ayudará a poder embarazarte más fácilmente, a tener un embarazo más sano, y a que ni tú, ni tu bebé tengan riesgos al momento de su nacimiento.
Te compartimos las diferencias en riesgos –encontradas por Emily Oster y publicadas en su libro “Expecting Better”, el cual te recomendamos mucho:
Si eres una mujer con sobrepeso, tú y tu bebé tienen más probabilidades de padecer estas condiciones. Por ello, es mucho mejor que cuides tu peso y estés sana antes de embarazarte. Recuerda que durante el embarazo no se recomienda hacer dietas, ni ejercicios muy extremos para bajar de peso. ¡Así que manos a la obra!
Comienza a comer más sano, para que puedas disfrutar de esta gran etapa sin ningún problema.
Por último, para asegurarte que estás perfectamente sana para embarazarte, te invitamos a que leas: Estudio médico antes del embarazo.