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Idealmente, cada mujer elige cómo quiere vivir su parto. Esto se puede lograr si ella se informa y realiza un plan de parto con todas las especificaciones de lo que le gustaría y lo que no le gustaría que le hicieran durante el nacimiento de su bebé. Una manera de llevar a cabo esta preparación para el parto es tomando clases prenatales. En ellas, las mujeres pueden adoptar una ideología de cómo se debe vivir ese momento tan importante.
Actualmente existen dos métodos o ideologías de preparación para el parto:
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Método Lamaze:
Este método se basa en la creencia de que el nacimiento es un proceso “normal y natural” para el cual el cuerpo de la mujer está diseñado. Establece que no es necesario que las mujeres dejen este momento enteramente en las manos del médico, sino que son ellas quienes deben manejar la situación, después de haberse preparado a través de una intensa investigación y diversos ejercicios de meditación.
Sin embargo, el método Lamaze no adopta una postura firme en contra de las intervenciones médicas, sino que pretende dar la información necesaria para que las mujeres lleguen a sus propias conclusiones sobre qué es lo que necesitan y qué no para sentirse seguras y respetadas al dar a luz. De esta manera, ellas pueden decidir si quieren ser anestesiadas, si van a permitir una episiotomía o en qué casos permitir que se les realice una cesárea.
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Este método se concentra en principios fisiológicos y de meditación. En otras palabras, se basa en que todas las mujeres tienen la sabiduría y la fuerza para soportar un parto. Por lo tanto, simplemente se les dan guías para que su cuerpo y mente estén preparados para ese momento.
Método Bradley:
Este método, también tiene la premisa de que el parto es un proceso natural, solo que a diferencia del método Lamaze, este sí aconseja evitar el uso de medicamentos y no permitir la intervención médica, a menos de que exista una complicación y resulte imprescindible para asegurar el bienestar de la madre y el bebé.
Uno de los principales objetivos de este método, es lograr una participación activa del padre del bebé durante el parto, pero también durante el embarazo.
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Asimismo, hace hincapié en llevar una buena alimentación, aprender técnicas de relajación y concentración, y hacer ejercicio. Este método, además recomienda la lactancia exclusiva materna y el contacto temprano entre el bebé y la madre, así como entre el bebé y el padre. Usualmente, este método es adoptado por mujeres que prefieren un parto en casa y lejos de los ámbitos hospitalarios.
Te recomendamos pensar ampliamente en qué tipo de parto quieres tener, y después, investigues dónde puedes encontrar la ayuda que necesitas para lograrlo. Una vez que te hayas decidido, también puedes elegir entre varios tipos de clases prenatales para prepararte (En este artículo podrás conocerlos). No olvides informarte y dejar muy claro qué es lo que quieres. ¡Mucha suerte en ese momento tan importante!
