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A lo largo de toda la humanidad, las personas han recurrido a los mitos para explicarse ciertas cosas difíciles de entender. Muchos de esos mitos se han desenmascarado gracias a la ciencia; sin embargo, muchos otros han quedado como creencias arraigadas en nuestra sociedad. Esto pasa con el tema del embarazo. Para que tú no creas en ideas erróneas, aquí te traemos los mitos del embarazo más famosos:
- No puedes tener relaciones sexuales. Este mito pierde cada vez más fuerza, no obstante, muchas parejas se siguen absteniendo de tener sexo por temor a lastimar al bebé. La verdad es que son muy pocos los casos en los que no puedes tener relaciones sexuales, por ejemplo: en los embarazos de alto riesgo, donde médicamente está contraindicado tener sexo.
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- Tienes que comer por dos. No tienes que comer por dos, pero sí tienes que cuidar muy bien tu alimentación. Procura que sea balanceada y que no te falte ningún nutriente.
- Si te dan agruras o te dan náuseas, es porque tu bebé nacerá con mucho pelo. No tengo idea de dónde salió esta idea, pero la verdad es que la cantidad de cabello solo depende de la carga genética. Igualmente, que tu bebé tenga mucho pelo estando dentro de tu vientre, no te causará agruras ni náuseas.
- Si comes muchos productos lácteos, tu bebé nacerá con una capa de sebo. Primero que nada, no elimines los productos lácteos de tu dieta durante el embarazo, ya que necesitarás el calcio. Y segundo, es normal que los bebés nazcan con una capa de “sebo” (Para saber más acerca de las características del recién nacido, da clic aquí), pues esta les ayuda a mantenerse protegidos en tu vientre. ¡Y no tiene nada que ver con lo que comes!
- Si no cumples tus antojos, tu bebé nacerá con manchas en la cara. Algunas personas incluso dicen que el bebé nacerá con cara de lo que se te antojó, por ejemplo, con cara de “cacahuate”. No, la apariencia de tu bebé solo dependerá de los genes.
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- No puedes entrar a la alberca o a bañarte en jacuzzis porque el agua le entrará a tu bebé. Si el agua fuera capaz de entrar a tu cuerpo de esta manera, nunca podrías bañarte. Para dejarte más tranquila, tu bebé está bien protegido porque tu útero está bien sellado. Si tienes la oportunidad, nada y disfruta de un buen baño en jacuzzi tantas veces como puedas.
- No debes hacer ejercicio, porque le haces daño a tu bebé. El ejercicio no solo no perjudicará a tu bebé, sino que te traerá muchos beneficios durante el embarazo. Solo debes cuidar que este no sea de alto impacto.
- Si ves un eclipse de luna, tu bebé nacerá con labio leporino. Este mito viene desde los aztecas, pues ellos creían que un eclipse era un mordisco en la cara de la luna, y lo mismo pasaba en la cara del bebé. Ellos creían que debían protegerse cargando algo metálico, y por eso todavía en nuestros días las mujeres se ponen un seguro metálico en la panza. El labio leporino no depende de los eclipses, sino de factores genéticos.
- No te puedes pintar el cabello. Este mito es más fácil de creer, pues es cierto que se deben evitar ciertas sustancias durante el embarazo para no dañar al bebé. Sin embargo, al hablar de tintes para el cabello, el cuerpo solo absorbe una cantidad muy pequeña de químicos, la cual es inofensiva para tu bebé. Si te sigue preocupando, tal vez te sientas un poco más tranquila si esperas hasta el segundo trimestre, cuando tu bebé es menos vulnerable.
- No puedes ir al dentista. Este mito tiene dos versiones, una más creíble que la otra. Por un lado, unos dicen que no vayas porque se te caerán los dientes. Esto no tiene fundamentos y es totalmente falso. Por otro lado, y un poco más creíble, es que la anestesia que te aplica el dentista puede afectar a tu bebé. ¡Tranquila! La anestesia al ser aplicada de manera local y en tan pequeña cantidad, no llegará a dañar a tu bebé.
- Debes ponerte un moño rojo encima de la ropa. Este mito es un poco más difícil de creer, pues se supone que este moño ahuyentará todo las cosas malas que le puedan pasar a tu bebé, por ejemplo: enfermedades, deformidades o que nazca antes de tiempo.
- Tu saliva es curativa. La saliva se ha utilizado a lo largo de la historia como remedio curativo para las quemaduras, piquetes o cortadas. Esta tiene una sustancia química llamada histamina que colabora a una rápida cicatrización y desinflamación de las heridas. Sin embargo, es mentira que la saliva de las mujeres embarazadas tenga una fuerza curativa superior a la antes mencionada.
- Debes dormirte del lado izquierdo para que tu bebé nazca sano: La posición en la que duermes no tiene nada que ver con el bienestar de tu bebé. Otras cosas, en cambio, sí influyen, como tu alimentación y los malos hábitos como fumar y beber alcohol.
- No puedes sentarte con las piernas cruzadas: Según este mito, si te sientas cruzando las piernas, tu bebé se enrollará el cuello con el cordón umbilical.
Ahora ya puedes sentirte más tranquila sabiendo que estos mitos del embarazo, son solo eso, mitos. Dedícate a disfrutar al máximo esta etapa de tu vida y no hagas caso a todas estas creencias populares. ¿Has escuchado algún otro mito del embarazo?
