Si te preguntas cómo recuperar tu figura después del parto, la única respuesta que te podemos dar para que lo logres es: ten una buena alimentación y realiza ejercicio de forma constante. Sin embargo, antes de poder meterte de lleno a alguna rutina física deberás esperar a que tu cuerpo esté listo. Para saber cómo bajar de peso después del embarazo, da clic aquí.
El estado de recuperación de tu cuerpo durará las primeras 6 a 8 semanas posteriores al parto (un poco más en caso de cesárea). Durante este tiempo te puedes lastimar si le exiges demasiada fuerza o intensidad a tu cuerpo. Esto no quiere decir que debas permanecer en cama y sin moverte, más bien significa que debes tener ciertas precauciones a la hora de hacer ejercicio. Puedes hacer ejercicio después del parto pero te recomendamos evitar las abdominales y no cargar mucho peso. También, para evitar cualquier tipo de infección, te recomendamos que evites nadar hasta que tu doctor te diga que lo puedes hacer. Además, a tu cuerpo le tardará aproximadamente 6 meses volver a su nivel hormonal normal, en estos primeros seis meses deberás evitar hacer ejercicios de muy alto impacto ya que estos pueden dañar tus articulaciones.
En caso de que hayas tenido un parto natural, puedes realizar ejercicios ligeros desde los pocos días después del nacimiento de tu bebé, como flexiones o yoga. También, a partir de la cuarta a sexta semana podrás empezar a hacer ejercicio cardiovascular un poco más intenso, aumentando la intensidad de modo muy gradual. Para saber cuando empezar a aumentar la intensidad de tu ejercicio, escucha a tu cuerpo. Usualmente las mujeres que se ejercitaron durante todo su embarazo pueden empezar a ejercitarse antes. Sin embargo, si tuviste una cesárea, debes esperar hasta que el médico te dé luz verde para poder ejercitarte. En este caso, lo más recomendable es caminar a paso lento para mantener a tus músculos activos. Para ambos tipos de parto, te recomendamos no dejar de fortalecer tu zona pélvica haciendo ejercicios de Kegel similares a los que hacías durante el embarazo.
Después de que haya pasado el tiempo de restablecimiento de tu cuerpo, puedes ir aumentando la intensidad y la duración de los ejercicios, hasta volver a tu rutina original. Si no hacías ejercicio previo a tu embarazo, este es un gran momento para comenzar y darle un ejemplo saludable a tus hijos. Sin embargo, antes de decidir aumentar demasiado el ritmo del ejercicio, te recomendamos acudir a tu médico para asegurarte que tu cuerpo está libre de riesgos.