Fuente: flickr.com / Haylee Sherwood
No te tomes el berrinche en público como algo personal.
Tu hijo no está haciendo un berrinche para hacerte quedar mal, simplemente lo está haciendo porque aún no sabe como expresar su frustración o enojo de otro modo. Es posible que la gente se les quede viendo, pero que a la vez simpaticen contigo o con tu bebé.
Nuestra sugerencia es que procures alejarte del lugar en el que está sucediendo el berrinche, para que no interrumpas las actividades y conversaciones de las personas alrededor de ti. Sin embargo, no te enfoques en lo que los demás piensan, ni pierdas el control por ello. Enfócate más en acompañar a tu hijo durante su berrinche.
Trata de desconectarte de posibles sentimientos de vergüenza y de enfocarte en esperar a que se le pase la rabieta a tu bebé.
Recuerda que gritarle o castigar a tu hijo solo empeorará la situación. Ten en cuenta que la frecuencia de los berrinches disminuirá conforme tu hijo vaya madurando, siempre y cuando tengas cuidado con que no se vuelvan una parte normal de su conducta. Para evitar esto trata de prestarle poca atención a sus berrinches, distraerlo y siempre explicarle que esta no es la manera de conseguir las cosas. Para aprender distintas estrategias para el manejo de berrinches en niños, te invitamos a leer el siguiente artículo: ¿Qué puedo hacer cuando mi hijo hace berrinches?.
Recuerda que los berrinches en niños son muy comunes, por lo que no eres la primera persona, ni la última a la que su hijo le ha hecho un berrinche en público, así que no sientas pena si lo hace. Intenta no prestar mucha atención a las otras personas cuando tu hijo hace una rabieta, en vez, enfócate en calmarlo y en explicarle tranquilamente porque no debe actuar así.
