MITO: “Debo usar ambos pechos en cada sesión.”
REALIDAD: No hay reglas establecidas sobre cómo debes amamantar. Lo que te recomendamos es que en cada sesión inicies amamantando a tu bebé con un pecho, y dejes que lo vacíe para que de esta manera pueda aprovechar tanto la leche inicial, como la leche posterior. Después de que tu bebé vacíe el primer pecho, deja que eructe y acércalo al segundo pecho. Si tu bebé aún tiene hambre, seguirá comiendo. Si no, espera hasta la siguiente sesión e inicia con el pecho que no vació en la sesión anterior.