A cada rato se dan los sentimientos de celos y envidias entre padres e hijos, en la pareja, en la familia política, entre hermanos. Se dan en una o en ambas direcciones. Por ello, entender la diferencia entre ambos es el primer paso para identificar el problema y poder hacer algo respecto.
- Los celos involucran a tres personas. Uno siente celos al molestarse por el trato que recibe de otro y se siente amenazado por la relación entre los otros dos. Un caso típico es cuando un hermano siente celos por la atención que la mamá le da a su hermanito recién nacido.
- La envidia se da entre dos. Quien siente envidia desea algo que tiene la otra persona y no quiere que lo tenga. Un ejemplo: un hermano que envidia las capacidades intelectuales o atléticas del otro, o un marido que envidia que su esposa sea más libre, carismática o preparada que él.
- Los celos son una respuesta a una amenaza que se siente hacia una relación que se ve como valiosa.
- La envidia es una expresión de hostilidad que, además de la amenaza, incluye el deseo de destruir a la persona a quién se percibe como superior.
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Ambas son negativas y ambas se pueden dar también de modo imaginario. Por ejemplo: el yerno se imagina que su suegro es más capaz que él y lo envidia, el hermano se siente celoso por creer que su madre quiere más a su hermanita que a él, o el marido que está convencido que su esposa es infiel. Además del daño que se hace la persona a sí misma por estos pensamientos (imaginarios o reales) y las emociones negativas que de ellos se derivan, muchas veces se daña la relación con la otra u otras personas.
Por lo general las reacciones que se dan en ambos casos son similares. Los celos y la envidia se pueden manifestar de forma directa, por ejemplo: jalando a mamá para que deje al bebé recién nacido, no invitando a la suegra jamás; o indirectamente, realizando competencias entre hermanos por la atención de papá con comentarios agresivos como: “¡ay sí!, te crees mucho porque te dieron un ascenso en la chamba” o “mi hijo tuvo una pésima mañana así que no vamos a ir a casa de tu mamá” (llorando o haciendo berrinche).
¿Cómo manejar los celos y la envidia entre hermanos?
- Reconocer que uno puede tener alguno de estos sentimientos.
- No hacer comparaciones (Ejemplo: “Ya quisieras cocinar como mi mamá”, “tu hermano corre más rápido que tú”).
- Decirle al hermano que viene un bebé y asegurarte de incluirlo en actividades, como ayudar a bañarlo, jugar juntos. También puedes darle un regalo de parte del bebé.
- Platicar con la persona adulta o adolescente quien está sintiendo estas emociones y tal vez ir juntos a terapia (como dice el dicho: “los toros se ven mejor desde la barrera”).
- En el caso de niños, leer juntos libros tales como: “Te digo lo que siento”. Puedes encontrarlo en: http://toolsescuelas.com.mx/preescolar-2/
¿Las peleas entre hermanos son normales? Averígualo en el siguiente artículo. https://labebeteca.com/son-normales-las-peleas-entre-hermanos/
¿Sabías que…? La envidia está conectada con el no tener (o con imaginarse no tener). Los celos están conectados con el tener (o con imaginarse tener).