Hace un par de días descubrí a mi hijo Mikel agarrando la tapa de su biberón y poniéndosela encima para cerrarla. Me sorprendió mucho porque es algo que no le he enseñado expresamente, pero claro yo lo hago todo el tiempo. Fue en ese momento cuando me puse a pensar en lo importante que es predicar con el ejemplo porque hay cosas que simplemente con hacerlas, y hacerlas bien, nuestros hijos aprenderán y replicarán.
5 buenos hábitos que debes enseñar a tu bebé
- Tender la cama: Aunque sean pequeños y por el momento no puedan ayudarnos a jalar una sábana, el ver que todas las mañanas haces la cama les enseñará esta tarea diaria.
- Lavarse las manos: Aunque las toallitas húmedas y el alcohol en gel siguen siendo mis mejores aliados, ahora le lavo las manos antes y después de cada comida, luego de cambiarle el pañal y por supuesto, ¡cuando las tiene llenas de tierra! Después de un par de semanas de seguir esta rutina, ahora cuando le pongo el jabón en las manos, él las frota para lavarlas. ¿Quieres saber más de este tema? Da clic aquí.
- Lavarse los dientes: Mi pediatra me recomendó dejar que Mikel empezara a jugar con el cepillo desde que le salieron los primeros dientes, que en nuestro caso fue alrededor de los 4 meses. Siete meses después, al terminar el baño, mi pequeño capataz agarra su cepillo y se lava los dientes mientras su papá y yo hacemos lo mismo.
- Recoger sus juguetes: Desde un principio,después de jugar dejaba que mi pequeño torbellino me viera recoger sus juguetes y mientras lo hacía, cantaba una canción. Ahora en cuanto empiezo a cantar, él sabe que es la hora de guardar y me ayuda hasta que no queda nada fuera de lugar. TIP: Para facilitar esta tarea es importante tener un sitio adecuado donde poner los juguetes, que siempre sea el mismo y sobre todo que sea completamente accesible para tu hijo. En nuestro caso, utilizamos unas cajas de plástico que tenemos en la sala y en su cuarto.
- Leer: La lectura es un hábito y no hay nada mejor que inculcárlo a nuestros hijos desde pequeños. Yo me acuerdo de mi mamá leyendo todo el día, aún hoy lo hace, y estoy segura que es por eso que los libros son una de mis pasiones. Espero poder hacer lo mismo con Mikel, y como ahora no tengo tiempo de leer para que él me vea, lo que hacemos es que todas las noches, sin pretexto, leemos un cuento. Lo que he conseguido hasta ahora con esta rutina es que mi niño ya sabe pasar las hojas de los libros y es capaz de señalar algunos personajes.
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