Te sugerimos que antes de embarazarte tomes en cuenta algunos consejos que te preparen para la maravillosa etapa que estás a punto de vivir:
- Visita a tu médico: Una revisión médica exhaustiva es importante porque podrás descartar cualquier infección o enfermedad que tenga que ser tratada antes del embarazo. Muchas veces se recomienda la aplicación de vacunas preventivas contra enfermedades contagiosas como la varicela o la rubéola. Además, la visita servirá para responder las dudas que tengas sobre el proceso para embarazarte y sobre el embarazo.
- Acude al ginecólogo: A diferencia de tu médico familiar, la visita al ginecólogo se centrará en descartar infecciones sexuales que puedan ser transferidas a tu bebé, ya sea durante la gestación o durante el parto.
- Revisa tu peso: En caso de que tengas sobrepeso o que presentes peso bajo relacionado con desnutrición, te recomendamos acudir a un nutriólogo para que te ayude a llegar a un peso saludable.
- Deja de fumar: Fumar durante el embarazo puede causarle problemas irreversibles a tu bebé. Incluso las toxinas que se han ido acumulando en tu cuerpo antes de tu embarazo pueden representar una amenaza. Por lo tanto, te recomendamos dejar de fumar un año antes de embarazarte.
- Evita el alcohol: Aunque el alcohol antes del embarazo no está prohibido, te recomendamos evitar consumirlo en grandes cantidades. El consumo desmedido de alcohol agota la vitamina B, desequilibrando el funcionamiento de tu cuerpo.
- Toma ácido fólico: Se recomienda empezar a tomar ácido fólico desde tres meses antes del embarazo. Un abastecimiento adecuado de esta vitamina es fundamental para asegurar tu salud y la de tu bebé. Una vez confirmado el embarazo, es importante que sigas consumiendo el ácido fólico por lo menos durante los primeros tres meses.
- Aliméntate sanamente: Es importante que prepares a tu cuerpo con la cantidad adecuada de vitaminas, proteínas y carbohidratos. Si sientes que no tienes una dieta balanceada, te sugerimos visitar a tu médico o a un nutriólogo para que juntos establezcan una dieta equilibrada.
- Habla con tu pareja: Una buena comunicación les ayudará a asegurarse que los dos se encuentran en la misma sintonía emocional. Es fundamental que los dos se sientan preparados para compartir la futura responsabilidad del embarazo y de la crianza de su bebé.
- Revisa tu estado económico: Desear un hijo no es suficiente razón para tenerlo. Antes, tu pareja y tú deben asegurarse que tienen los medios suficientes para darle el cuidado y la atención necesarios.
- Establece una rutina para dormir: Se acabaron las trasnochadas, o al menos como estilo de vida. Una buena rutina para dormir te permite equilibrar tu organismo y acumular las reservas que tu cuerpo necesita para el desarrollo de tu bebé.
Por último, haz un calendario con tus días más fértiles para que aumentes la posibilidad de tu embarazo.
¡Esperamos que todos estos consejos te ayuden a sentirte mejor y a preparar a tu cuerpo para tu embarazo!